Daniel Barenboim viajó a Buenos Aires durante los días 29, 30 y 31 de agosto, para celebrar su 60mo aniversario como pianista. En estas series de recitales el concertista dirigió al coro y a la orquesta del Teatro Scala de Milán, y juntos interpretaron “Aída” y la Misa de Requiem, las dos obras mas famosas de Verdi, comunicó
Julio Ernesto Gutiérrez Conte.
El administrador de Aeropuertos Argentina 2000 además señaló: “Es importante contar que la Misa de Réquiem, estrenada en la iglesia de San marco de Milán el 22 de mayo de 1874 como homenaje al poeta italiano Alessandro Manzoni en el primer aniversario de su muerte, va más allá del enfoque litúrgico en virtud del dramatismo impuesto por Verdi. La gran variedad de recursos musicales la convierte en una obra paradigmática, donde permanentemente se oponen las ideas de: vida y muerte, luz y sombra, perdón y paz. Es para destacar que la relación entre el coro y los cuatro solistas mostraron la madurez musical del compositor e impresionaron al público que asistió al teatro el 30 de agosto a disfrutar de esta única función de Misa de Réquiem”.
Julio Ernesto Gutiérrez Conte también explicó que: “En este contexto, el coro conmovió de la primera a la última nota, y la orquesta volvió a brillar en todos los sectores junto a las voces del tenor Fabio Sartori, la soprano Marina Poplavskaya, la mezzosoprano Sonia Ganassi y el bajo de Kwangchul Youn, quienes tuvieron a su cargo la difícil tarea de encarar los complicados concertantes y solos, con la fuerza expresiva que requiere la partitura del maestro italiano”.